Las termitas: biología
Las termitas, termes, o también llamadas hormigas blancas, se incluyen dentro del orden Isóptera.
Se trata de insectos sociales que forman colonias (con una organización similar a la de las hormigas y abejas) y cuyos individuos se incluyen en diferentes castas o clases sociales que presentan una morfología diferente y desempeñan funciones distintas.
Se alimentan de materiales a base de celulosa (papel y madera), encontrando en las residencias humanas la combinación ideal de temperatura, humedad y alimento.
Debido a que las termes necesitan humedad y tienen una baja tolerancia al aire, viven bajo el suelo, atacando cualquier estructura (construcciones que contengan madera) que alcanzan desde el exterior a través de la cimentación, construyendo galerías entre muros y tabiques hasta alcanzar sus objetivos, provocando importantes daños en estructuras, mobiliario, bibliotecas, etc.
Especies de termitas en España
Termitas subterráneas: Reticulitermes banyulensis y Reticulitermes grassei
Se alimenta fundamentalmente de madera puesta en obra (vigas, marcos de puertas y ventanas, armarios, parqué, rodapiés, etc.).
Abre galerías interiores en la madera, dejando íntegra la capa más externa, dejando la fina capa de barniz o pintura. Las colonias de termitas pueden estar formadas por millones de individuos. Es la especie de termita presente en España que más daños causa.
Termita de la madera seca: Kalotermes flavicollis
Se extiende por toda la zona mediterránea, y sus colonias se componen de 1.000 a 1.500 individuos. Ataca a los troncos de especies arbóreas debilitadas como el olivo, ciprés, pino, sauce, falso plátano, la morera y el almez; y a las cepas de vid, principalmente en viñas viejas. Estos insectos excavan galerías, apareciendo zonas carcomidas en el interior de la parte leñosa de la planta. Pueden atacar marcos de puertas y ventanas exteriores, que colonizan a través de las termitas voladoras reproductoras.
Termita de la madera seca: Cryptotermes brevis
Es una termitas que anida directamente sobre madera seca de carpinterías y mobiliario. Forma colonias independientes con no más de 300 individuos. Son muy voraces y tienen mucho éxito para invadir las maderas.
La madera atacada presenta en su interior grandes cavidades o cámaras unidas entre si por túneles. Algunas de estas cavidades o galerías presentan gran cantidad de deyecciones o granulado.
Las castas en una colonia de termitas
Pareja de termitas Real
Tienen a su cargo la función reproductora. La termita Reina que ocupa junto con el Rey una celda real, no pueden alimentarse por sí solos y se desplazan muy poco. Pueden vivir durante años (20 - 25 años), poniendo miles de huevos a lo largo de su existencia.
Reproductores suplementarios (Neoténicos)
Actúan como sustitutos de la reina si ésta se muere, o cuando cualquier agente físico o químico rompe o separa el termitero. También pueden poner huevos incluso si la reina está sana cuando conviene incrementar con rapidez el tamaño de la colonia. A veces forma termiteros secundarios.
Reproductores primarios (termitas aladas o termitas voladoras)
Son las castas de termitas con capacidad reproductora, que vuelan fuera de la colonia para formar una nueva. Después de aparearse, pierden sus alas, hacen una excavación en el suelo y comienzan un nuevo termitero. Son de color oscuro (no confundir con las hormigas aladas)
Termitas soldados
Con cabezas armadas muy quitinizadas y fuertes mandíbulas. Protegen a la colonia de la agresión exterior. Su principal enemigo son las hormigas. Representan el 2-4 % de la población.
Termitas obreras
Son la casta de termitas más numerosas de la colonia (el 90% de la colonia son obreras). Ciegas y estériles, proveen a la colonia de comida. Únicamente las obreras son capaces de alimentarse por sí mismas, intercambiando después material alimenticio con las demás castas y las ninfas* de los primeros estadíos mediante la transferencia de comida de ano a boca o de boca a boca (la trofalaxia). Son las que causan la mayor parte del daño en las viviendas.
Están en constante movimiento en busca de comida, basada en material celulósico que transforman en azúcares.
* Ninfas de termitas
El estado intermedio entre larva y adulto. Se transformarán en alados y neotécnicos.
Castas de termitas
Hábitat de las termitas
Las termitas forman colonias o termiteros y viven agrupadas en comunidades organizadas.
Acostumbran a vivir en lugares subterráneos.
Se dice que son insectos lucífugos, que huyen de la luz, pero lo cierto es que las termitas son ciegas, salvo los reproductores primarios (termitas voladoras). Más bien, el motivo de que se escondan y no se dejen ver con facilidad, es debido a que necesitan una cierta cantidad de humedad. Si se desplazasen por el exterior, fuera de las galerías de barro que construyen o a plena luz del sol, se resecarían tanto que podrían morir.
- Termiteros construidos normalmente bajo tierra, en estructuras complejas.
- Las termitas obreras salen a buscar alimento, continua y aleatoriamente.
- Construyen los termiteros protegidos del aire y de la luz directa del sol.
- Toman su aporte de humedad por capilaridad por el suelo, de la madera húmeda, por fugas y filtraciones, por la condensación, etc.
- Puede haber un sólo centro reproductor o varias estructuras conectadas entre sí.
Comunicación en la colonia de termitas
Antenas y palpos
Las termitas identifican el medio en el que viven mediante el uso de las antenas y los palpos.
Feromonas de pista
Se desplazan y comunican gracias a sustancias específicas que van dejando detrás de ellas y que sus congéneres reconocen. Son las feromonas de pista.
Sonido y trofalaxia
Comunicación por sonido y por la trofalaxia.
Feromonas de alarma
También existen las feromonas de alarma, segregadas en caso de peligro y destinadas a alertar al resto de la población.
El ciclo de vida y reproductor de las termitas
En el origen de una colonia de termitas, hay una pareja de reproductores.
Son los fundadores de la colonia y se les reconoce de los otros individuos de la colonia, por tener un tamaño más grande, en especial la reina, que presenta un abdomen hipertrofiado de color algo oscuro y franjas de color marrón. Carece de alas y se desplaza muy poco. Pone huevos sin parar. Su tamaño varia en función de su evolución. Es alimentada y limpiada por las termitas obreras que se encargan igualmente de recoger los huevos.
El rey, presenta un color más oscuro y puede moverse encargándose de fecundar regularmente a la reina.
Propagación de las termitas
Por enjambre vía casta alada: La formación de una nueva colonia se puede producir de diferentes formas, pero lo más común es que en determinadas épocas del año, numerosas parejas reproductoras aladas, abandonan en enjambre (El emjambrazón) el termitero donde han crecido, dispersándose en todas las direcciones.
Los días cálidos y soleados entre los meses de mayo y octubre, subsiguientes a lluvias de cierta importancia, favorecen los vuelos de adultos fundadores de nuevos termiteros y la dispersión de la plaga. Después de un corto vuelo, caen al suelo y al encontrarse con otro individuo del otro sexo, buscan un lugar en el suelo o en la madera, dónde excavar una cámara nupcial, en dónde se producirá la cópula y realizará la primera puesta de huevos, que al eclosionar dará lugar a las primeras larvas. Estas primeras larvas, son alimentadas por la madre y una vez han crecido, se transforman en obreras y se encargan de la construcción del termitero y de la alimentación de las siguientes ninfas y de la pareja real. Durante un largo periodo siguen naciendo obreras, hasta que al fin nacen individuos sexuados funcionales y soldados.
Por escisión: Cuando la colonia madre se hace muy grande, un grupo de individuos se va separando progresivamente del termitero para crear una nueva colonia, invadiendo normalmente las construcciones vecinas. También se puede dar la circunstancia de que un número de individuos se quede aislado de la colonia principal. Si entre ellos hay reproductores suplementarios (neotécnicos), puede dar lugar al nacimiento de una nueva colonia.
Por transporte accidental: Materiales o maderas de cierto tamaño contaminados con termitas y que son trasladados de un lugar a otro.
La presencia de un "enjambrazón" de termitas voladoras en una vivienda indica que la estructura puede estar atacada
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